miércoles, 2 de abril de 2008

Máximas para mi

Y ya que venía contando de mi, por qué soy como soy, vale la pena contar que a la edad de 12 ó 13 años, no recuerdo bien (20 años atrás... cómo se va la vida eh) recibí de manos de mi madre un regalo... de esos regalos importantes, esos regalos que no se olvidan, porque quedan marcados en la piel y en el alma como un tatuaje... era una simple hoja de papel, que ella escribió a máquina para mi, y junto con el papel que me daba me dijo "Estas son las Máximas para mi Hija, que San Martín escribió para su hija Merceditas y hoy yo te las escribí para vos". Aún conservo la hoja, la tengo en el escritorio en este momento para transcribirla acá... y nada, creo que esto también forma parte de mi manera de ser, de mi esencia, y por supuesto, se lo debo a mi madre.

MÁXIMAS PARA MI HIJA

1a- Humanizar el carácter y hacerlo sensible, aun con los insectos que no perjudican.
2a- Inspirarla amor a la verdad y odio a la mentira.
3a- Inspirarla gran confianza y amistad, pero uniendo el respeto.
4a- Estimular en Mercedes la caridad a los pobres.
5a- Respeto sobre la propiedad ajena.
6a- Acostumbrarla a guardar un secreto.
7a- Inspirarla sentimiento de respeto hacia todas las religiones.
8a- Dulzura con los criados, pobres y viejos.
9a- Que hable poco y lo preciso.
10- Acostumbrarla a estar formal en la mesa.
11a- Amor al aseo y desprecio al lujo.
De El Santo de la Espada, de Ricardo Rojas.


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